Empresa privada será la gran beneficiada porque se usarían recursos públicos para la construcción del aeropuerto cusqueño cuando el acuerdo original obligaba al consorcio a invertir en el inicio de las obras.
Con la adenda al contrato de concesión de la construcción del aeropuerto de Chinchero que el gobierno de Pedro Pablo Kuczynski se propone suscribir con el Consorcio Kuntur Wasi, el Estado será perjudicado porque se variará el esquema original que aseguraba que la empresa privada haría una importante inversión, señaló Patricia Benavente, ex presidenta del consejo directivo del Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de uso Público (Ositrán).
La ex funcionaria renunció luego que dos miembros del consejo directivo de Ositrán, Antonio Balbuena y Alfredo Dammert, votaron a favor de la adenda al contrato de concesión, mientras que Benavente se pronunció en contra.
“En la versión original del contrato, el concesionario (Kuntur Wasi) era responsable por el financiamiento de las subetapas 2 y 3, que según el Programa de Obras correspondía al 71,4% del presupuesto total, mientras que el Concedente (el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, MTC) tenía a su cargo el financiamiento de la subetapa 1. Sin embargo, con el proyecto de adenda, el concesionario (Kuntur Wasi) solo es responsable por el financiamiento del 19,3 por ciento del presupuesto total de las obras, mientras que el Estado debe asumir el financiamiento por el 80,7 por ciento restante (…)”, arguyó Patricia Benavente.
La ex presidenta del Consejo Directivo de Ositrán concentró el cuestionamiento a la adenda en que el Consorcio Kuntur Wasi conseguirá mayores ingresos por la concesión del aeropuerto en desmedro de los recursos públicos, lo que no estaba previsto en el contrato firmado el 4 de julio del 2014.
Dinero fácil
“En consecuencia, la asignación del riesgo de financiamiento se invierte, variando drásticamente –al pasar de un esquema de financiamiento del concesionario a uno de financiamiento del Estado–, tal cual propone el proyecto de adenda. Esto evidencia una clara variación de los términos originales del contrato en detrimento del Estado y del esquema de APP (Asociación Público Privada”, advirtió la ex presidenta de Ositrán.
El 25 de enero, cinco días después de votar en contra de la adenda al contrato con el Consorcio Kuntur Wasi, el ministro de Economía, Alfredo Thorne, anunció que el proyecto de aeropuerto en Chinchero había dejado de ser una APP y que se convertiría en una obra pública y que con el nuevo esquema el Estado ahorraría 589 millones de dólares.
Empero, la ex presidenta de Ositrán alertó que claramente la adenda vulneraba la ley porque dejaba de lado la fórmula de APP que aseguraba la inversión privada en el proyecto y que, con las modificaciones al contrato inicial, obtendría grandes beneficios el concesionario.
“Esta modificación (que contiene la adenda) favorece claramente a la empresa concesionaria (Kuntur Wasi) –toda vez que se encargaría de efectuar íntegramente la Sub Etapa 1 y 2, ascendente a 410 millones de dólares–, con recursos íntegros del Tesoro Público, y en el cual el concesionario (Kuntur Wasi) no requiere colocar capital, y por tanto obtendría rentabilidad del orden del 20 por ciento”, sustentó la ex presidenta de Ositrán.
Fuente: LaRepública
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