Tarata

viernes, 23 de diciembre de 2016

Hildebrandt Sobre PPK: Es el Iglesias que Pacta con Lynch y se Convierte en Vasallo Suyo


"Plantear la lucha en las calles y desde las organizaciones sociales activamente alertas frente a la amenaza que se cierne sobre el país, es la primera opción. Las calles y los colectivos democráticos nos salvaron del fujimorismo. Tendrán que volver a hacerlo." Expresa el periodista independiente César Hildebrandt.



PPK ganó las elecciones gracias a los colectivos civiles y peruanos que tienen memoria del pasado de terror, corrupción y saqueo al Estado peruano por parte del gobierno de Fujimori. PPK es el resultado del rechazo a la podredumbre, de un narco Estado al que representa el fujimorismo. A continuación el análisis de César Hildebrandt que es un referente del periodismo en nuestro país.



La lucha ya no pasa por PPK, nos ha traicionado
Por César Hildebrandt

“…Recapitulemos: en las elecciones pasadas nos salvó el asco reunido, el miedo de millones que no querían que la historia se repitiera. Nos salvó la memoria y el instinto de conservación. Por eso ganó PPK. No porque fuera un gran candidato ni porque su programa encandilara a las multitudes sino porque se presentó como el retroviral que podía alargar la vida de la democracia peruana.

Y ahora resulta que el hombre que impidió que el narcoestado volviera al Perú -¿te acuerdas, pelona?- aparece como un hombre plagado de flaquezas, rehén de sus adversarios, subordinado de los voceros de la mafia. socio a la fuerza de la maquinaria que ha establecido un gobierno paralelo y usurpador en el Congreso.

PPK nos ha traicionado. Nos dio su palabra de que no habría transacción posible con quienes representaban un peligro para la supervivencia del país como nación civilizada, nos ha defraudado.
Tiene miedo PPK. Miedo de enemistarse con quienes, en el fondo, admira y con quienes está de acuerdo -ahora lo vemos- en todo lo esencial. Miedo a que la "mancha blanca" que lo asiste y lo explota huya espantada ante el primer cruce de espadas, Miedo de que la opinologia mercenaria y conversamente fujimorista ; lo empiece a atacar. PPK le teme al cargo, a la responsabilidad, a la batalla. Cree que la política consiste en ceder, que la sensatez se expresa apareciendo con cara de abuelo que dispara lugares comunes y que los "grandes intereses del país" exigen algo así como un ritual de castración. PPK es un hombre de poco carácter y está asustado. Fujimorisrno ahora sabe que ganará por walkover. Y el país, esta vez sí, se halla en peligro.

La lucha que libraremos quienes nos negamos a aceptar el regreso de la yakuza peruana a la plenitud del poder ya no pasa por Palacio ni por PPK. Ahora pasa por rearmar el tejido social contestatario que, en 72 horas, volteó la última elección en favor de lo que creíamos que era el rostro de la honestidad. Lo que PPK no sabe es que al rendirse patéticamente ante el fújimorismo resulta contaminado. No es el débil que se retira del combate que no quiere librar, es el pusilánime que, al transar, se asocia con los propósitos del enemigo. PPK no es el Piérola que huye a Europa después de sus anchas derrotas. Es el Iglesias que pacta con Lynch y se convierte en vasallo suyo.

Plantear la lucha en las calles y desde las organizaciones sociales activamente alertas frente a la amenaza que se cierne sobre el país, es la primera opción. Las calles y los colectivos democráticos nos salvaron del fujimorismo. Tendrán que volver a hacerlo. En cuanto a PPK, él se lo ha buscado. Su régimen, hoy socialmente ilegítimo y políticamente despellejado, depende de la voluntad rencorosa de la hija del reo. Eso ya poco importa. Es el fujimorisrno el que ha empezado a gobernar abiertamente. Que Zavalita termine contando sus cuitas en "La Catedral”, tampoco importa. Zavalita bien sabe cuándo se jodió el Perú.”



Fuente: HildebrandtEnSusTrece

No hay comentarios :

Publicar un comentario

Nos importa tu opinión. No te vayas sin comentar.

//